Ayer estaba muy cansado y me quede dormido mirando la tele, y en lo que para mi fue un parpadeo ya se habían hecho las 5 y por la posición, medio sentado medio acostado, me dolía el cuello como si tuviera tres o cuatro tortícolis juntas (porque mierda se llama así, debería llamarse torticuellicolis, aunque sea mas largo el nombre por lo menos tiene algo que ver, no?). El caso es que como tenia aun 1 hora hasta las 6, me di una vuelta y seguí durmiendo, esa hora la iba a aprovechar, carajo!.
No se como, ni porque, pero parece ser que la posición adoptada no fue la mas correcta, o por lo menos la usual, ya que yo todas las mañanas me pongo 2 despertadores, uno a las 6 y el otro a las 6:10, con repeticiones cada 8 minutos… Y para apagar el primero (el teléfono) SIEMPRE me doy una vuelta en la cama y extiendo el brazo hasta la mesa de luz de mi izquierda y lo apago sabiendo que me quedan pocos minutos ya de sueño.
Hoy fue muy diferente. Al darme la ya clásica vuelta en pos de apagar el teléfono siento como que floto en el aire, luego un fuerte golpe en el mentón, tipo “uppercut”, y se ve que como seguía flotando no atine a otra cosa que a agarrarme de lo único que tenia a mano, la sabana de arriba (no muy firme, por cierto) mi vuelo termino como te podrás imaginar dándome un culazo en el suelo con un dolor impresionante en el mentón y eso si, bien agarrado de la sabana de arriba. LA PUTA QUE LOS PARIÓ, me dije (a modo de voz interna ya que no quería seguir haciendo ruido).
Luego pude comprobar que lo que yo pensaba que era un uppercut de un boxeador del peso pesado, llámese Tyson, llámese Monzón, llámese lo que sea… fue el cajón de la mesita de luz (me cago en ella) que me dio de lleno y me dejo un “chichón” como los que me hacia cuando era chico.
Y si algunos dicen “hoy me levante con la pata izquierda”, yo les digo, “y a mi que me contás, si yo me levante de culo!”
Y te garantizo que no trae suerte, cuando estaba en la loma del orto trabajando, se me rompió la transmisión del furgón. A llamar a la grúa y a aguantar el berrinche del Big Boss, que lo que el no sabe, es que me da igual, ya que no duele lo mismo que darse la pera con el cajón de la mesita de luz.
Bueno, lo dejo por acá, no vaya a ser que me caiga de la silla y me rompa algo mas.
Pd: Por lo menos no me pasó lo que decía siempre el viejo :”Me caigo de espaldas y me rompo la pi__!!”
O eso creo, lo voy a comprobar.